El zellige de Marruecos, con sus matices y juego de colores, está atrayendo cada día, a más y más diseñadores de interiores. ¡Seguro que tu también vas a sucumbir al encanto y la magia de los moroccan tiles!
Con toda la moda de los productos étnicos artesanales de Marruecos, como la cestería, los trabajos en metal, las alfombras marroquíes, y sobre todo, las preciosas y cálidas alfombras Beni Ouarain, no hay nada sorprendente que el zellige también se haya convertido en «tendencia» en el mundo de la decoración de interiores.
¿Tendencia?
Sí, pero no para todo el mundo. Su uso sigue siendo bastante restringido, limitado a decoradores y diseñadores de interiores.
¿Qué son los zelliges?
El zellige en árabe, significa «pequeña piedra pulida» y se refiere al mosaico realizado a base de pequeños fragmentos de azulejos de colores.
Esta técnica ornamental magrebí consiste en ensamblar baldosas de terracota, hechas de arcilla gris de Fez y esmaltadas en diferentes colores, para crear mosaicos con patrones matemáticos.
Es lo que admiramos cuando visitamos Marruecos o Andalucía; la ornamentación zellige que cubre la decoración de paredes de palacios y fuentes.
Pero hoy en día, reducimos el zellige a una versión más austera en comparación con el uso tradicional de los mosaicos multicolores.
Apostamos por superficies monocromáticas, donde nada llegue a distraer la mente del sutil juego de variaciones de colores.
¿Por qué el zellige es tan seductor?
Lo que es mágico en el zellige son los matices y la forma en la que esta cerámica refleja la luz.
Además, como estas baldosas esmaltadas son planas y están cortadas con bordes biselados, no hay juntas marcadas.
Esto permite cubrir una pared de una manera «uniforme».
Sin embargo, el zellige es un producto artesanal, lo que significa que cada pieza está llena de matices y asperezas.
Por ejemplo, a veces pueden haber variaciones significativas de color entre baldosas, e incluso, en una misma baldosa. Pero este es su encanto.
¿Cómo podemos utilizar el zellige en la decoración?
El zellige marroquí, está atrayendo a cada vez más diseñadores de interiores, ya que da mucho carácter a cualquier decoración.
Su juego de matices y asperezas es mágico en la decoración de baños.
Y pueden aportar calidez a esos interiores que son demasiado minimalistas y contemporáneos.
Lo interesante es jugar con los contrastes de las baldosas brillantes y las superficies mates, o con los matices de los colores de las propias baldosas zelliges.
Al igual que la técnica marroquí del tadelakt, el zellige se utiliza principalmente en cocinas y baños.
El zellige es esencialmente un revestimiento de paredes. Sin embargo, también existen zelliges «para el suelo» o bejmats, que son más gruesos, pero para áreas con poco tráfico, ya que su esmalte sigue siendo frágil.
¿Es caro el zelligue?
Sí.
El zellige, aunque proviene de Marruecos, al ser un producto artesanal, es caro. Tendremos que pagar más de cien euros por un metro cuadrado. Seguramente, esto explica por qué sigue siendo un secreto a voces.
¿Te dejas seducir por los «moroccan tiles»?
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