En el extremo sur de la isla, Telfair Golf & Wellness Resort se extiende a lo largo de una playa paradisíaca. A la sombra de los cocoteros, el verano discurre allí a su propio ritmo, entre baños de sol y sesiones de ohashiatsu.
En medio del Océano Índico, se necesitan una buena docena de horas para llegar a Mauricio. Un arduo viaje que olvidarás casi de inmediato, una vez que pongas los pies en el suelo de Mauricio.
Y es en su extremo sur donde se encuentra Telfair Golf & Wellness Resort, un hotel muy conocido por los viajeros más experimentados.
Renovado el año pasado, el hotel tiene la ventaja de ofrecer una amplia gama de actividades: golf, windsurf, buceo, pesca, pero también y sobre todo, una serie de sesiones de bienestar personalizables.
En el corazón de un spa que parece un jardín del Edén, el visitante pasa a las manos expertas del fisioterapeuta, que además de aliviar tensiones, está lleno de buenos consejos.
Adaptándose a las necesidades y deseos de cada individuo, los tratamientos varían entre masajes siguiendo los preceptos del Ayurveda (materializados por diferentes colores y simbolizando diferentes puntos y chakras), tratamientos faciales, sesiones de ohashiatsu (practicadas al aire libre sobre un tatami, arrullados por el susurro de la flora y la fauna), o incluso, clases de yoga y pilates.
En cuanto a las habitaciones, todas cuentan con una decoración refinada, con influencias coloniales con camas con dosel, muebles en tonos claros y baños vestidos con azulejos.
