¿Cómo decorar un salón acogedor? Para hacer que un espacio se sienta acogedor es cuestión de atraer a todos los sentidos; debes pensar en el aroma, el tacto y el sonido, de modo que todo se combine para crear un ambiente hogareño propicio para relajarse y descansar.
Te has desplomado en el sofá de tus sueños, has comprado una nueva mesa de centro de madera y has decorado el salón con tus objetos favoritos, pero nada parece cohesionarlo todo en un esquema sosegado y tranquilo.
No se necesita mucho para darle una sensación cálida y acogedora a un espacio; probablemente ya tengas la mayoría de las herramientas, pero requiere un poco de reflexión. No se trata solo de encender algunas velas y sacar una mantas de lana.
A menudo, son los toques finales los que establecen el estado de ánimo y dictan la sensación de un espacio.
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Todos los muebles que necesitas para tener un salón de revista
8 consejos e ideas para hacer que tu salón se sienta más acogedor, cómodo y cálido
Los salones acogedores hacen que vivir en ellos sea más fácil y natural porque han sido diseñados pensando en la comodidad, desde la disposición de los muebles hasta la iluminación y los materiales utilizados.
Textura y tacto
Suaviza las líneas limpias, las paredes desnudas y los espacios abiertos colocando capas de textura en tu sala de estar. Las texturas son tu arma secreta. Cambia los materiales sintéticos artificiales y las superficies brillantes por materiales naturales como la madera, el ratán, el mimbre, el yute, el algodón orgánico y el lino.
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Evita cualquier cosa que se vea demasiado perfecta o pulida. Una superficie prístina puede parecer aburrida y unidimensional a nuestro ojo. Sin embargo, agrega algo de tacto y complejidad, y comenzará a parecer interesante e intrigante. No podrás evitar acariciar los pliegues de un cojín de lino, envolverte en una manta de sofá de lana alrededor de tus hombros o apreciar la veta natural de la madera.
Formas suaves y bordes redondeados
Una sala de estar acogedora necesita formas suaves y curvas para dar una sensación de confort. Los bordes duros y afilados y muchas líneas rectas sugieren una sensación de rigidez e inflexibilidad, dando la impresión de que tienes que sentarte con la espalda recta y tomártelo todo en serio.
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Propicia un ambiente más relajado permitiendo que tu sala de estar sugiera un tipo de comportamiento más despreocupado. En una acogedora sala de estar, querrás que los muebles se sientan como si estuvieran casi abrazándote y dándote un cálido abrazo, para que puedas hundirte en un sofá, acurrucarte y ponerte cómodo.
Los muebles circulares, como una mesa de centro redonda de madera, alientan a reunirse a su alrededor, como lo hicimos una vez alrededor de un fuego, mientras que las esquinas redondeadas en elementos como sofás y sillones los hacen sentir más táctiles y acogedores.
Agrega cojines de sofá blandos a las superficies duras y alfombras de salón suaves como las preciosas alfombras beni ouarain marroquíes debajo de los muebles.
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Agrega un poco de color y tono
Las paredes blancas pueden sentirse luminosas y aireadas durante el día, pero con la iluminación inadecuada pueden sentirse bastante rígidas y frías. Agrega un toque sutil de colores tierra en las paredes para darle calidez al salón; un beige claro por ejemplo, hará que el espacio se vea más acogedor y natural.
También puedes introducir algo de color en tus accesorios. Elije colores complementarios que estén uno frente al otro en el espectro para crear una apariencia equilibrada (por ejemplo, azul marino y naranja) o combina tonos terrosos.
Todo lo que necesitas para presumir de salón
Apaga la luz del techo
Nadie quiere sentarse en un salón por la noche con la luz del techo encendida al máximo: el resplandor brillante lo hace sentir a uno alerta y despierto, no descansado. Instala un interruptor de atenuación en tus lámparas de salón y superpón la iluminación con múltiples fuentes de luz para crear un ambiente cálido y acogedor.
Ten muchas luces de acento para ayudar a configurar la escena con una luz más suave y difusa. En una sala de estar acogedora, usa lámparas de mesa para crear puntos focales en las mesas auxiliares, aparadores y estantes; esto te ayudará a llamar la atención hacia esos rincones.
Usa tus muebles para crear momentos de intimidad
Deja que los muebles conversen entre si. Puedes sentirte más cómodo si estás ubicado en el lado opuesto o en ángulo con respecto a alguien.
A menudo, la primera idea que viene a la cabeza, es empujar todos los muebles contra la pared para intentar dar una mayor sensación de espacio. Pero esto puede dar la sensación de que estás en una sala de espera en la consulta del médico. Agrupa los muebles para dar una impresión de intimidad, por ejemplo, un sillón colocado en ángulo frente a un sofá.
Bloquea el mundo exterior
Para tener realmente un salón acogedor has de crear un espacio tranquilo y reparador lejos de todo. A menudo, esto puede significar alejarse de las personas y del ruido y del estrés del mundo moderno. Cuelga cortinas de lino natural sobre las ventanas para dar una sensación de privacidad, activa el silencio de tu teléfono por las noches, pon música relajante y acurrucate.
Usa aromas cálidos y edificantes
El olor a comida cocinada, ropa de cama mohosa y aire estancado no te hará sentir cómodo. Crea el ambiente idóneo con aromas relajantes que puedan transportarte a un pequeño momento de escapismo. Asegúrate de ventilar la habitación durante el día, luego, por la noche, enciende una vela o rocía un poco de spray ecológico por la habitación. Usa aromas que te recuerden una época en la que estabas relajado.
Trae el aire libre con aromas ahumados y amaderados o crea una sensación de spa con lavanda fragante y notas verdes frescas. El aroma tiene una poderosa influencia en nuestro estado de ánimo: tan pronto como se encienden las velas, envía una pequeña señal a nuestro cerebro de que es hora de relajarse.
¿Qué te hace sentir como en casa?
Para algunos, podría ser estar rodeados de plantas y flores. Para mí, los libros me hacen sentir como en casa al instante. Piensa en lo que te conecta con tu hogar y rodéate de las cosas que amas. Al darle un significado más profundo a un espacio y pensar detenidamente en los objetos que nos rodean, podemos crear un interior super acogedor e intimo más allá de la estética.
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Ahora, siéntate y disfruta verdaderamente de los espacios cálidos, tranquilos y calmados que tienen los salones acogedores.
A que sienta bien, ¿verdad?
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