¿Quién no ha soñado con tener un refugio secreto en un árbol?. Como los niños, la mayoría de nosotros hemos fantaseado con la idea de tener una casa en un árbol, un refugio seguro lejos de la mirada de nuestros padres.
Curiosamente, la gente en algunos países no ven las casas en los árboles como algo tan exótico, sino como parte de su día a día.
Por ejemplo, en Nueva Guinea, los Korowai viven en los árboles de forma permanente. Las casas construidas en los árboles ayudan a proteger los alimentos de los animales y de las inundaciones, manteniendo todas sus pertenencias por encima del nivel del suelo.
Por suerte, las casas en los árboles, se ha convertido en algo más que un cuento de hadas.
Para aquellos que buscan hacer realidad uno de sus sueños más profundos de la infancia y están buscando una manera diferente y única para recargar las pilas y relajarse, arquitectos y diseñadores de todo el mundo están ofreciendo impresionantes diseños para construir casas en los árboles.
Estos han superado con creces el tradicional concepto de la cabaña de madera, ofreciendo múltiples pisos e incluso elementos de cristal o espejo.
Pero al igual que los árboles, cada casa es totalmente única. Algunas están destinadas a mimetizarse directamente con el bosque, mientras que otras tienen el verdadero propósito de sobresalir.
Ahora, esta pasión infantil, se está convirtiendo en un negocio para muchos empresarios del sector turismo.
Los “tree hotels” es lo último en viajes originales y en turismo de naturaleza. Hay cientos de ellos en todo el mundo.
¿Te apetece soñar como un niño?